Bienvenidos:
Esta página (en construcción) realizada sin fines de lucro, es un homenaje a don Florencio Molina Campos y a los gauchos de mi tierra pampeana. Sus obras son un valioso recurso para acercarnos a la tradición y nos permiten conocer de manera natural, graciosa y tierna, las costumbres de nuestros hombres de campo. Datos obtenidos de la web, de la página oficial (Molinacampos.net), de la Fundación MolinaCampos (http://molinacamposfundacion.org) del Museo Las Lilas, de San A. de Areco, que invito a visitar y especialmente a mi amigo el Dr. Osvaldo Pamparana fiel representante de la obra de don Molina Campos.
El autor de ésta web
Eduardo A. Finocchi, Fotógrafo, Ex-Jefe Dpto. Fotografía de la H. Cámara de Diputados bonaerense (Jubilado). Webmaster, autor de las páginas "El Album de La Plata" (https://www.elalbumdelaplata.ar) y "Legislatura Bonaerense” No oficial (https://legislatura-ba.blogspot.com/), ambas Declaradas de Interés por la Honorable Cámara de Diputados de la provincia de Buenos Aires, Argentina.
Becado
por la Comisión Nacional de Cultura, en 1937, Florencio viajó a los Estados
Unidos, lugar que le sirvó de inspiración para mostrar los contrastes del campo
con la gran metrópilis. Una de sus primeras obras allí muestra al gaucho Lindor
sofrenando un potro en Nueva York.
En
1938 expuso en la Gallery of the English Book Shop, de Nueva York, y sus obras
se publicaron en importantes semanarios. Para fomentar el interés de los
estudiantes en los temas latinoamericanos, el fundador de la Universidad de Texas
en Austin le pidió sus obras para exponerlas de forma permanente. Las empresas
comerciales de Estados Unidos consideraron a Molina Campos como una gran
tentación.
Walt
Disney en Argentina
En
el año 1941, estando Molina Campos de viaje, Walt Disney visitó la Argentina
para conocer el país donde estaban "esas cosas curiosas que pintaba
Florencio". Visitó la estancia y le manifestó a su esposa, Elvirita, su
deseo de contratar a Florencio para que lo asesorara en una película sobre la
vida y costumbres de los habitantes de América del Sur.
El
encuentro entre Disney y Molina Campos se produjo en Río de Janeiro, y en 1942
comenzó a trabajar como technical advisor para supervisar las películas
"El gaucho reidor" (o "The flying gaucho") y "Goofy se
hace gaucho". Los films llevaban a una parodia y deformación de los
paisanos y nuestras costumbres. Chocó el interés comercial de Disney con la
defensa de las tradiciones gauchescas de Molina Campos.
PALABRAS DE MOLINA CAMPOS
“Yo he querido y me he propuesto, como una expresión de fe religiosa, que el espíritu heroico y nobilísimo de nuestros gauchos de antaño no desaparezca de entre nosotros, arrollado por el embate materialista y grasero del modernismo; que no se borre jamás la fuente inspiradora de nuestra nacionalidad; y humildemente, a la zaga de Martín Fierro, de Santos Vega y del Fausto argentino, los cantos máximos del alma gaucha, voy manteniendo vivo el fuego a ese culto… El gaucho se va. Lo ha desalojado el modernismo y vive ya solo en la leyenda. Pero yo confío en que, al darle forma gráfica, se adentre de nuevo en nuestra vida de hoy y siempre, como lo estuvo en nuestro glorioso pasado”. (Extracto de “Molina Campos en Hollywood. Alma de Gaucho”- entrevista a Florencio Molina Campos publicada en la Revista Cine Mundo, Nueva York, 1942)
Dijo Florencio Molina Campos en 1951:
"Yo no hago más que expresar la realidad, exagerando ciertos rasgos –como si los viera a través de un lente deformador- de personas y animales. Pinto al gaucho, el que he visto en años lejanos, cuando aún existían verdaderos gauchos, porque los conozco y los comprendo. Dentro de poco, aventados por el progreso y el cosmopolitismo, será tarde copiarlos del natural. El gaucho se va convirtiendo a toda prisa en el "peón" sin características raciales, así como el ganado criollo se ha ido transformando en pacíficos "puros de pedigree" de todas las razas. Simplemente quiero captar y perpetuar en mi obra todo lo que hay de interesante y pintoresco en ese gauchaje que pronto será sólo un recuerdo, una leyenda".
“YO SERÉ LA GUARDIANA”
A su muerte, su enamorada Elvirita le dedicó estas palabras…
.
Yo seré la guardiana
de tu pampa y de tus cielos.
De tus humildes ranchos
Bañados por la lluvia, por la luna o por el sol.
Regarán de lágrimas
Tus montes de espinillos,
y muy, muy dentro del mio,
tendré tu corazón.
……
Yo seré la guardiana
de esa riqueza inmensa
que cuidaré mientras viva,
con razón i sub razón.
Y en un abrazo tierno
de infinita dulzura,
Estrecharé por siempre
tu pampa hecha canción.
Dijo Florencio:
Yo le diría a los escritores, a los músicos, a los pintores: vayan a la pampa, a los montes, a las sierras y recojan nuestro inmenso caudal disperso, que aún están a tiempo para salvar el folklore nativo. “¡Triste será que las futuras generaciones nos pidan cuentas! ¡Triste será que no podamos decirles que fue del gaucho y que hemos hecho por mantener la Tradición nacional!”
Florencio Molina Campos